Odilón Larios Nava / @odylarios
Dos hombres fueron acusados de ser delincuentes, por lo que pobladores de San Agustín Tlaxco, en el municipio de Acajete, los retuvieron durante horas en la presidencia auxiliar y amagaban con lincharlos. Fue gracias a la Secretaría de Seguridad Pública Estatal (SSP) y a la policía de Acajete, en coordinación con un representante de la Secretaría de Gobernación que lograron negociar y liberar a los dos retenidos.
Las personas acusaban a estos dos hombres de haber intentado asaltar a una menor, otra versión indicó que la pretendían secuestrar y otra más que le hicieron tocamientos lascivos, pero no se confirmó ninguna de ellas. En el caso de los retenidos, ellos indicaron que se encontraban en el lugar porque habían ido a buscar a un conocido.
Las versiones de los pobladores indicaron que alrededor de las 17:30 horas, al menos cinco sujetos a bordo de una camioneta intentaron jalonear a una chica de 17 años. Tres de ellos escaparon, pero dos fueron capturados por la policía.
Como la gente se comenzó a congregar rápidamente, la policía de Acajete solicitó apoyo a otras corporaciones y llevó a los detenidos a la presidencia auxiliar, en donde los mantuvieron retenidos. Los pobladores se encuentran organizados como vecinos vigilantes, lo que ocasionó que en cuestión de minutos se congregaran frente a la presidencia auxiliar cerca de 500 personas.
Algunas de ellas clamaban por linchar a los presuntos delincuentes. La camioneta en la que se trasladaban los probables maleantes fue bañada con gasolina e incendiada.
Los dos hombres capturaros se identificaron como Rosendo L. G., de 16 años, y Herson C. G., de 33 años. Quienes, aunque estuvieron resguardados por la policía, antes de ser llevados a los separos, fueron golpeados, por lo que requerían de atención médica.
Policías estatales y un representante de gobierno del estado, llegaron al lugar para dialogar con las personas, fue hasta casi las diez de la noche cuando permitieron que entraran las asistencias prehospitalarias y así los dos hombres fueron llevados ante el Ministerio Público para que finque o deslinde responsabilidades.
Los pobladores exigieron vigilancia permanente en la población por parte de la Policía Estatal, ya que aseguran el nivel de inseguridad en el pueblo ha ido aumentando.
