Habitantes de La Trinidad Sanctórum dijeron vivir diariamente con la pestilencia que genera un canal a cielo abierto de aguas pluviales, pero que ahora es un receptor de aguas negras.
Este foco de infección que está en la comunidad de Cuautlancingo, traslada “aguas de colores” siendo el más predominante el verde oscuro.
Señalan que este escenario de contaminación ya tiene varios años y ninguna autoridad ha querido resolverlo, pese a que el canal natural pasa por un polígono donde se ubica una escuela, un centro de salud y un fraccionamiento de más de mil viviendas.
Cuestionados sobre dónde provienen las descargas, los vecinos del lugar indicaron desconocer esa información, aunque contaron que hay varios tubos de drenaje que vierten aguas negras en su trazo.
También expresaron que el “agua verde” contiene contaminantes que ocasionan la pestilencia, porque se dice que algunas empresas y maquiladoras encontradas en la zona contribuyen con este panorama de daño ambiental.
Este canal desemboca al río Atoyac pero antes de llegar a ese arroyo, su estructura atraviesa por varios puntos del territorio de esta junta auxiliar.
Este canal – continuó- lleva pestilencia a diferentes zonas comerciales y habitacionales, por lo que pidieron a la alcaldesa Guadalupe Daniel, frenar la contaminación en esta zona y regular más la actividad industrial.