Desde este día comenzó a reportarse una llegada de visitantes a los panteones de San Andrés Cholula, esto es vísperas del 1 y 2 de noviembre, días donde el pueblo mexicano recuerda a sus muertos.
En el camposanto de la cabecera local, es donde se observó una notoria presencia de personas, quienes esperaron turno para ingresar a estos recintos, donde el acceso es controlado y además hay filtros sanitarios para evitar posibles contagios de coronavirus.
Con flores en manos, palas y botes, es como llegaron los sanandreseños a estos espacios, donde a diferencia de años pasados, en éste no se vio puestos informales y tampoco comerciantes de flor de cempasúchil.
Es más, varios de los visitantes fueron hasta los campos cercanos a la zona y que adornan la Gran Pirámide de Cholula para adquirir ese producto, cuyo manojo oscila en los 40 pesos.
Tampoco se vieron los tríos, grupos norteños o mariachis, cuyos músicos le apostaban a ofertar sus servicios entre las familias que acudían a estos lugares y que destinaban algún presupuesto para que sus familiares ya fallecidos, a través de esta creencia mexicana, una vez más volviera a escuchar las melodías que en vida llegaron a cantar o bailar.