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La mujer de 27 años de edad que fue encontrada sin vida en su domicilio en San Pedro Cholula, era tatuadora y no fue asesinada sino que se quitó la vida.
Fuentes policiales señalan que la joven dejó una carta póstuma, después se encerró en su recámara, encendió un anafre y se recostó, lo que ocasionó que perdiera la vida, aparentemente por inhalación de monóxido de carbono.
La última vez que fue vista con vida fue el sábado pasado y al no tener noticias sobre ella, su familia se preocupó y comenzó a buscarla, fue así como acudieron, junto con el padrastro de la joven, a la casa ubicada en la 9 Norte y 2 Poniente, en donde la encontraron muerta y en avanzado estado de descomposición.
Se descartó que se tratara de feminicidio y se sabe que tenía problemas personales, que la habrían orillado a tomar esta fatal decisión.